Así pues, el día se presentó soleado, con una temperatura muy agradable para esto del correr y con el ambiente festivo que rodea a este tipo de pruebas (aunque no todo lo festivo que me imaginaba...), ingredientes suficientes para pasar una agradable mañana y, de paso, aprovechar a perder algo de lo ganado en estas fechas de excesos gastronómicos, aunque me temo que, por lo menos en mi caso, lo recuperé esa misma tarde.
A las 12:30 se daba la salida a las carreras de los niños y a las 13:20 más menos nos tocó a los senior y veteranos. La carrera consistía en una vuelta corta de aproximadamente 1 km y posteriormente 2 vueltas a otro recorrido de algo menos de 2 km, dando un total de 4.800 para categoría masculina y para la femenina dieron una vuelta corta y una larga, total unos 2.900, metro arriba metro abajo. Tomamos la salida casi un centenar de personas, demasiada poca gente para mi gusto y es que me temo que esta carrera no se promociona lo suficiente y no llega a la mayoría de los abulenses.
La salida/meta estaba situada en la Avenida de la Juventud, a la altura de las pistas de la "deportiva". Pistoletazo, la gente sale a toda pastilla, como suele ocurrir en estas carreras cortas, menos yo que ya he tenido algunas malas experiencias que por salir demasiado deprisa al principio, la carrera corta al final se me ha hecho muy larga. Primeros metros llanos, giramos a la derecha por la Avenida Agustín Rodríguez Sahagún y nos encontramos con la principal dificultad orográfica del recorrido: una cuestecilla corta pero matona, como es la primera vuelta, la paso sin problemas pero ya me quedo con la copla que tengo que pasar dos veces más por ahí y que me va a costar... Bajamos un poco y giramos nuevamente a la derecha para ir al encuentro de la Avenida de la Juventud y pasar por la línea de meta. Hemos dado una vuelta a la manzana, llevamos como 1 km y yo ya empiezo a notar que pese a mi ritmo "cómodo" (lento), lo voy a pasar un poco mal.
Nuevo paso por mi amiga la cuestecilla, que hace que ya me empiece a caer mal, y subida más tendida a lo largo de la Avenida Agustín Rodríguez Sahagún, bajada por la misma avenida y nuevo paso por meta. En este último tramo, fuimos espectadores de excepción del paso de los primeros clasificados, incluso de la llegada a meta de algunos de ellos. A nosotros todavía nos quedaba una vuelta, así que nos pusimos a ello.
En el último paso por la cuestecilla, definitivamente rompí cualquier tipo de relación de amistad con ella por volverme a romper el ritmo. Subida y bajada por la avenida y entrada "triunfal" en meta. Uno que lleva pocas batallas y todavía se emociona al terminar.
Esta ha sido mi primera participación y creo que no será la última. A su favor, tiene que me ha parecido una carrera cómoda, sin necesidad de planificarla mucho: llegas, te inscribes y corres. Además, es gratuita. También señalar que la organización de la prueba estuvo bastante correcta.
En contra, considero que debería publicitarse más. En Ávila hay muchísima más gente aficionada a estos saraos que apenas 100 personas y estoy seguro que si no han corrido ha sido por desconocimiento de su existencia o del día de su celebración. Tómese esto como crítica constructiva... unos cuantos participantes más, incrementarían el público, la animación, el ambiente festivo, etc, sin por ello incrementar el esfuerzo en la organización.
En resumen... volveré.
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